FUSTA

FUSTA es un espectáculo-instalación sobre el colapso climático y el despoblamiento rural. Es una experiencia que pone a disposición del público la vinculación entre estos dos conceptos que, en pocos años, dejarán de ser ideas para convertirse en una realidad incómoda que cambiará nuestra forma de vivir.

Según Xevi Solà, referente internacional en transición energética, en 100 años estaremos viviendo como nuestros abuelos. Si esto es así, todos aquellos conocimientos que estamos perdiendo con el despoblamiento rural serán indispensables para nuestra supervivencia.

FUSTA es una forma de recordarnos que necesitamos preservar los conocimientos ancestrales y la cultura de tradición como un tesoro. FUSTA es una manera de recordar todo lo que se deja atrás, todo lo que perdemos cuando los pueblos se van despoblando con la lentitud silenciosa de las personas mayores que mueren sin hacer ruido. Y con ellas, la transmisión oral: las canciones populares, las leyendas, las plantas que curan y las plantas que se cocinan, las recetas, perdemos el hacha, la hoz, la guadaña, la ajedrea, la verdolaga, la sanguinaria, el grito para llamar al rebaño a casa cuando cae la noche y el grito para llamarlo cuando cae la niebla.

El despoblamiento rural no es un dato ni una estadística. Es un proceso lento que se puede observar en la forma en que el bosque se va comiendo los campos. FUSTA es una pieza que invita a mirar el pasado, a entender el presente, y a preguntarnos cómo queremos escribir el futuro. Es un espectáculo que interroga sobre qué ocurre cuando los pueblos se vacían, cuando los jóvenes se van a ciudad, cuando las personas mayores se mueren y con ellas mueren tantas cosas que no sabíamos que tenían valor.