Como si de un hilo se tratase, la cultura va tejiendo territorios y paisajes, construyendo un mapa geográfico y emocional que aporta valor a la sociedad. En Málaga, este hilo se desplegó en unas jornadas que reunieron a instituciones, proyectos locales e iniciativas privadas para reflexionar sobre cómo la cultura conquista nuevos territorios, impulsa raíces y da forma a un tejido que trasciende fronteras.